miércoles, 1 de abril de 2009

A VOS

En este tiempo que pasó, me daba miedo acercarme a un teclado o tomar un papel en blanco y una lapicera y pensar por unos minutos porque sabía que esto que ahora pasa ocurriría. Pueril cobardía de evadir esa sensación que me pedía desaforada descomprimirse. Un mes. Miedo a escribir y que las lagrimas desborden por mi interior para desembocar en mis ojos, miedo a quebrar esa mascara de “Ya estoy mejor”, miedo a extrañarte infinitamente y sentir ese dolor tan intrínseco que me hace caer en tu ausencia. Un mes. Pero lo cierto es que desde aquella noche no hay un día en que no te dedique un pensamiento. Tengo la inocente esperanza de que una tarde me golpees la puerta para invitarme –en mi casa- a tomar unos mates cebados por tus manos tan dulces, o darte un abrazo o contarte mis cosas y vos escuchándome y haciendo carne mis boludeces. Ahora que te escribo, vuelvo a llorar pero creo que no son lagrimas tan fatalistas como aquella vez sino que son una especie de reclamo que mi amor te hace por no poder escuchar tu voz, por no poder abrazarte, pero se que en un lugar chiquito de mi razón sé que fue lo que debía ser, lo mejor. Me enojo conmigo por llorar, lo venía reprimiendo, no quería volver a sentirme así, porque todo el sufrimiento más visceral lo había dejado un mes atrás. Pero tengo un sensibilidad muy debilucha y como dicen el tiempo todo lo cura y lo lava, sí, pero yo te extraño y creo que esa batalla el tiempo no la puede ganar. Te sueño todas las noches, y no es verso, en cada acción de mi vida, en cada acto, algo me conecta con vos, quiero entender a esta mierda de destino (que todo lo que no se entiende va a parar a esa bolsa llamada Destino) que dice que la materia se acaba y se acaba. Pero no hay reparo, ni parche para el que queda anclado acá. En un mes, todos siguen su vida y, a veces, siento que el olvido se hace presente para ellos, pero yo no puedo, mierda que fuiste importante que con solo imaginarte o pensar en tus palabras la visión se me nubla. Trato de seguir mi “vida” pero sabés que sin vos é Molto difícile, voy a tu casa y siento tu perfume, tengo un pequeñísimo segundo en donde pienso que al abrir la puerta vas a estar sentada y te vas a poner contenta al verme y me vas a abrazar y bueno, esas cosas. Tu habitación se me volvió un muro impenetrable, no puedo soportar entrar y no verte en tu cama, pienso que estas en la cocina, o en otro lado. Yo sé que estas conmigo, lo siento, pero sabes que nunca soporte los dolores, lo sabés, y ahora lloro y no quiero, porque paso un mes y siento que te tengo que pensar y sentir de otra manera, me cuesta, lo intento, pero en esta noche que me sincero conmigo y me permito volver a sentirme como se me canta, tengo un cartel que me dice que te extraño pero, al mismo tiempo, algo serena estoy porque creo que estas bien. Necesitaba canalizar esa fuerza que me empujaba desde adentro del pecho, y se verbaliza como te dije en, te extraño, estoy mas serena, pero te extraño, mi llanto, hoy, es de amor, de gratitud. Más fuerte que vos no hay, soy la inversa tuya, pero sabes que el olvido no es lo mío, y te repito no hay un solo día que no te recuerde, esta es una fecha dura, vendrán otras, lo sé, pero de a poquito iré entendiendo eso que te mencione “Destino” que juega con nosotros sin pruritos. Me replanteo cosas, me reprocho otras, pero no hace falta que te escriba ni que piense lo que vos y yo sabemos, lo que te quiero, y yo que siguiendo a un autor que creo que no te lo nombre nunca ,Marx, siguiendo como piensa él, no creo en nada de religiones, ni de nada que tenga que ver con otros mundos, hoy me aferro desesperadamente a esta ilusión, esta ilusión es como esa pastillita que vos no querías que tome, que me ayuda a caminar sin miedo. Acostumbrarme a no tener mas abrazos tuyos, a no poder ver tu sonrisa, es una tarea muy ardua. Y bueno, es tarde ya, como dicen los redondos “maldición, mañana va a ser un día hermoso” cuando para mí se cumple el primer mes sin usted.

catarsis que hoy puedo publicar sin titubeos...al menos eso creo...