jueves, 19 de abril de 2007

Y OTRA VEZ EL APARATO REPRESIVO DIO QUE HABLAR…

La noticia me impactó. Carlos Fuentealba (docente) fue acribillado por un policía en medio de una manifestación. El hecho se produjo en Neuquén, provincia gobernada por (un cuazi – nazi) político llamado Jorge Sobish. Lo ridículo es que este maestro murió reclamando algo que le correspondía, tal vez buscaba una negociación pero al mejor estilo fascista, una orden bajó y comenzó el fusilamiento.
Fuentealba representa el caso de tantos maestros que a lo largo del país (como ocurre en Salta, Santa cruz, Formosa, Chaco, Corrientes…), exigen un aumento salarial, o mejor dicho, quieren conseguir otro sueldo que no sean los magros “salarios de hambre” que las autoridades otorgan. Pero este caso no se reduce solo a la muerte de un trabajador, sino que abarca un punto clave: la decadencia de la burguesía en el capitalismo argentino. Vayamos por partes…
Es cierto que el asesinato de Fuentealba marcó un punto de inflexión en la clase media (que se “solidarizó” con el docente, al extremo de la indignación y de mirar con buenos ojos a la marcha nacional. Clase que suele permanecer indiferente ante los conflictos del país a no ser que se les toque el…¿bolsillo?), sin embargo la lucha de estos trabajadores viene desde hace muchos años. Los docentes –como toda persona asalariada- son constantemente manoseados, algunos están ad honores, otros con (¿)sueldos (?) atrasadísimos, es decir su situación es humillante y esto ocurre en TODAS las provincias y hoy en Neuquén la lucha sigue, allí ocurre lo contrario que acá, el tema fue noticia por un día y a otra cosa.
Por lo tanto, digo que si bien es a nivel nacional el regateo de salarios a los trabajadores, en Neuquén se pasó un límite, quiero decir, la burguesía cruzó una línea peligrosa. Logró que la clase media –al menos por un día- se despertara de su letargo y se corriera de su cómodo acostumbramiento. Y al menos pudiera preguntarse por qué un maestro fue liquidado.
Mi intención es llegar a este punto: los que mataron a Fuentealba son los que integran el aparato represivo, aquellos que también hicieron desaparecer a Jorge Julio López (vale decir que el impacto de esta desaparición no fue compatible con la del maestro, en otras palabras, lamentablemente pegó distinto) y a otros compañeros en los años sangrientos. ¿Qué quiero decir con esto?, primeramente que la burguesía se encuentra en crisis, no son favorables las variables económicas que en otras oportunidades la han salvado, por ende sus aliados se ven afectados, porque hablamos de un Estado prácticamente arruinado, y su única salida es dar palos (¡y para nada gratis!). La represión sangrienta para sofocar los pequeñísimos auges de masas que se dan ante las injusticias sociales. Como la violencia sutil, es decir como los otros mecanismos de dominación dejan de ser efectivos se utiliza la “violencia legítima” para reprimir, se usa la fuerza, ya que una burguesía sin salida solo reprime, pero esto se termina cuando hay una respuesta organizada por parte de las masas.
Es importante aclarar qué es el aparato represivo, a qué me refiero con eso. Actualmente, después de 31 años del último golpe, toda la composición y estructura como las doctrinas sobre seguridad interior de las FF.AA. y las de los organismos policiales y paramilitares, siguen siendo los mismos. Los encargados de enseñarles a los oficiales subalternos como a superiores son los mismos represores que implementaron las teorías de la Seguridad Nacional. Parece un dato que no genera muchas sorpresas, pero es escalofriante. Piénsenlo así: el maestro que tiene un amplio currículum de torturas y otras yerbas le enseña a un oficial…¡Cuando lo correcto es que estuviera preso!...Ah no, claro, ¡cómo ellos los dueños del poder van a castigarse entre ellos! Imposible.
Otro aspecto importante es que una de las líneas de esa enseñanza, establece que por armamento obsoleto no se piensa en un enemigo externo sino que (no por casualidad) se los entrena para enfrentar a futuros enemigos internos (como levantamientos populares)
Con respecto a los militares y su actividad con el exterior, participan de misiones bajo el consentimiento de las Naciones Unidas (se sabe que es un instrumento de los yanquis y de otros países capitalistas desarrollados), por ejemplo, Argentina tiene desde hace años tropas en Haití, donde lo que hacen es deslizar una amplia gama de actividades represivas tanto “legales” como ilegales. Como este, hay otros casos. Pero en el ámbito nacional, la policía federal como la bonaerense, sigue compuesta por represores, por corruptos y también por ineficaces que continúan con sus particulares razzias en el conurbano, torturas, presos sin motivo solo por portación de cara, fusilamientos, matoneadas…¿Quiénes son los destinatarios?...las personas de bajos recursos, al mejor estilo de los `70.
Ergo, no creamos que por estar en democracia, la historia cambia, que hemos encontrado una suerte de panacea en donde somos todos libres, es decir, no vivimos en un paraíso, sino que transitamos en la democracia del capitalismo. Hecho que nos explica que el aparato represivo sigue vigente solo que a pasado a otras manos, me refiero a que el gobierno no es de nuestro presidente, si creemos que nuestro voto vale, que es representativo….queridos amigos, les digo que no nos hemos podido bajar de la utopía liberadora. Así es como el poder y su mandato les pertenece a los grupos económicos, a los grupos hegemónicos (sociales, políticos y culturales) internacionales y que bajan línea a los nacionales. Entonces, las bandas fascistas y las paramilitares siguen actuando…si el poder nunca se les fue cercenado…un claro ejemplo es el secuestro de Jorge Julio López, es como un avisito de que todavía están presente. López y Fuentealba fueron víctimas de este aparato, lo que pasa es que uno tiene más condescendencia por las clases que el otro, relacionado a la construcción de imaginarios, porque el primero fue ex montonero y el otro era un digno maestro.
Otro punto esclarecedor para comprender que estamos bajo la democracia del capitalismo es: Si el presidente tiene la facultad de intervenir la provincia ante tal agravante hecho…¿Por qué no lo hace, qué espera?, ¿No será que Kirchner no es tan distinto que Sobish?. El señor presidente que defiende “encarnizadamente” a los derechos humanos así como también a los militantes de los `70, si se acerca un poquito a su política, se ve claramente su tendencia a favorecer y resguardar los intereses de la burguesía local como los del papá grande del norte.
Es por eso que todo se mantiene igual, nada cambió, son los mismos, actúan igual, el mecanismo está intacto desde las órdenes del imperialismo yanqui, a sus siervos, o sea el aparato represivo: militares (gendarmería, prefectura,), policías, paramilitares, la estructura es la misma salvo que se intenta dar una fachada de libertad e igualdad.
Estos casos de muertes por la represión, van a seguir surgiendo ya que al estar en crisis y no poder enfriar al espíritu combativo de los trabajadores (a través de políticas reformistas, como ser aumentos disfrazados de salarios, y algún que otro beneficio ficticio), al verse en una mala coyuntura, solo queda el camino de la represión.
Si enfoco la cuestión en el tema docentes, los de las universidades también están en conflicto (pero para los neoliberales, la universidad pública debiera ser privada, no todos tendrían que acceder solo los más capacitados o aquellos que puedan pagarse sus estudios. Visión distinta que tenía el liberalismo clásico de la educación básica, aquel proyecto de alfabetización, que tenía que alcanzar a todos para utilizarlo como herramienta de manipulación, es decir, para instalar un conjunto de valores de una clase determina, la burguesía, para que todos conozcan como funciona el orden hegemónico establecido y que no haya posibilidad de revertir esto: la típica relación explotadores y explotados. Aunque ¿es tan distinta la visión actual de los neoliberales respecto a la educación básica?
Si esto es así, como vamos a pensar que el Estado se va a hacer cargo de la educación universitaria si quiere erradicarla (ya en una profunda crisis educativa), con su desfinanciamiento.
Desde los docentes de la UBA, vienen reclamando hasta el cansancio estos puntos: media canasta para el básico del cargo testigo (ayudante de 1° SE), salario para TODOS los ad honores, el 85% móvil para los jubilados.
Por lo tanto, al ver los afiches y como estamos próximos a las elecciones, me cuestiono que les significa a estos “manos de obra” del imperialismo que Argentina es un país en serio, un país distinto, ¿distinto de qué?, la explotación sigue su curso en la peor etapa del capitalismo, que acorralado muerde…lo único que me queda por decir o mejor dicho, citar las palabras de Karl Marx extraídas de Manifiesto comunista: “Que las clases dominantes tiemblen ante una revolución comunista. Los proletarios nada tienen que perder en ella, salvo sus cadenas. Y tienen un mundo que ganar.
¡Proletarios de todos los países, uníos!”
Ante estas situaciones totalmente injustas donde importa tanto el que da las órdenes como el que las ejecuta, como el que explota, como la clase que explota a los trabajadores, debe escuchase más fuerte que nunca el grito de: ¡Proletarios de todos los países, uníos!.

DESTACADO DE LA SEMANA:

Por fin algo bueno en la televisión, aunque la programación de Canal 7 –últimamente- , a mi parecer es muy productiva, el jueves 12 salió al aire el primero de los cuentos del “Negro” Fontanarrosa. Todos los jueves a las 22hs. Si tienen oportunidad, aunque sea una vez, mirenlo. Son espectaculares.

domingo, 1 de abril de 2007

2 DE ABRIL DE 1982: MALVINAS

Hoy me acorde de mis años en la escuela primaria (para que tengan una idea, transcurrió en la década del 90), específicamente, cuando – en cada nuevo aniversario de esta “guerra”- nos señalaban la imagen de las Islas Malvinas pintada con los colores de nuestra bandera e incluso nos enseñaban una canción que hacía alusión a la soberanía que teníamos sobre ellas. El concepto transmitido era sencillo, los maestros me decían que ese territorio nos pertenecía y punto. Pero estos discursos los absorbía con la mirada ingenua de una niña, en este momento –después de haber leído, analizado, escuchado testimonios de ex combatientes y con la extracción de una conclusión – siento que los años no han pasado, quiero decir, seguimos pensando igual que hace 25 años atrás, o peor, mi gran interrogantes es saber si los argentinos sabemos el por qué del desembarco de aquellas “tropas” al suelo inglés. ¿Tenemos alguna vaga idea –no oficialista- del motor de este enfrentamiento (aunque ¿puedo decir enfrentamiento?, porque este término supone dos rivales…yo visualizo a uno solo, al que le pusieron todas las fichas: Gran Bretaña. País que combatió con jóvenes CIVILES)?
El conflicto Malvinas fue el principio del fin –esto es lo único favorable de esta guerra- para el régimen genocida-militar de 1976. Luego de seis años, el 30 de marzo de 1982, se produjo la primera manifestación –importante- en contra de esta dictadura. El clima era desfavorable para las “botas”, sus órdenes eran insignificantes para un pueblo que fue brutalmente apaleado en Plaza de Mayo, por la policía en aquel 30 de marzo. Lo paradójico es que dos días después esa Plaza fue utilizada como escenario para decirle nuevamente SI al gobierno de facto. Porque el personaje indescriptible de Galtieri anunciaba – a ese lugar colmado de argentinos- la invasión al terreno inglés. Hasta acá, es la historia que conocemos, nada distinto. Pero lo interesante es que el planeamiento de la guerra se venía gestando hacía dos meses atrás, y que la movilización fue “la gota que rebalsó el vaso”, apelaron al ferviente nacionalismo, al golpe bajo, apuntaron a un tema válido, a recuperar algo que nos robaron, algo nuestro, pero con una forma errante y dirigido por personas non gratas. Es decir, utilizaron ese sentimiento para buscar consolidar sus intereses y perpetuarse (como así lo quería Galtieri) en el poder, si ganaban, todo cerraba perfecto…pero la historia se suscitó de otra manera. En cuanto a las cuestiones políticas, tanto Argentina como Inglaterra estaban bajando violentamente por un precipicio, próximos a sufrir un fuerte golpe, un poder debilitado y caído a pedazos, en donde una maniobra política podía salvarlos de esta situación, o sea, la idea era “salir lo más airosos posible” del lodo. Lo que quiero significar es que les importaba literalmente un carajo, el derecho que tenemos sobre las Islas, solo buscaban fortalecer su imagen política y conseguir el menor castigo por lo hecho años antes. Algo importante, los hegemónicos del Norte brindaron su apoyo al país imperialista, olvidando y como se dice “dejando pagando” a Galtieri y a sus favores en otras circunstancias. Y los medios de comunicación, como siempre, no originales, fueron durante toda la guerra funcionales a los militares, promoviendo el éxito y fabricando noticias favorables para la gente, el típico y tristemente célebre: “Estamos ganado”.
Lo que busco remarcar es el tema de los pibes que combatieron, esa huella que duele, como las otras atrocidades que dejó este delirante proceso. Duele como argentinos porque muchos de esos jóvenes –que algunos con la colimba “corre, limpia, barre”…¿Qué puede salir de eso, no?...y otros sin nada- fueron a pelear con la idea de hacerlo por la Patria, por su país. Lo que ignoraban, era el trasfondo político, el verdadero objetivo, era que unos hijos de putas los habían enviado al matadero. Por testimonios de ex soldados, se que pisaron suelo extranjero con muchas ilusiones y –como todo adolescente- creyendo que iba a ser algo fácil, desconociendo a que infierno los bajaron, sin saber lo que era “matar a otro porque sino me mata a mi”, sin conocimiento de lo que era el miedo, lucharon todo el tiempo solos en ese lugar que irónicamente les pertenecía pero que por el año 82 se había convertido en su peor enemigo, el frío que como un cuchillo cortaba la piel, los suelos húmedos, los pozos de zorro que inmediatamente se inundaban con el agua helada que brotaba de la tierra, el hambre que llegaba al límite de la locura, el miedo –acentuado en una persona que todavía no es adulta- la sensación de muerte o la muerte que no llega, los compañeros muertos o lo que es peor, los chicos mutilados por los bombardeos, estar escondidos en medio del agua, la soledad, la desigualdad en el combate y los responsables que estuvieron uno o dos días allí y luego se fueron dejando a estos pibes a la deriva, indefensos ante una mole sumamente entrenada para obtener buenos resultados en un conflicto bélico. Se me cruza por la cabeza la idea de que los que –supongo- sabían manejar las armas hubiesen dormido un día en el agua, que viviesen el hambre, el frío, que hubiesen estado en el hundimiento del General Belgrano, estar en la locura. Porque así comprenderán, como fue la guerra. O lo que es estar en una guerra y no irse cuando las bombas llegan.
Cuando esta parodia termino, ganó la pulseada Margaret Thatcher (permítanme darme esta licencia y decirle, esta vieja de mierda) y los chicos que “sobrevivieron” fueron tomados como prisioneros por los ingleses – muchos de ellos, utilizados para saber si los campos estaban minados o no- y lo ridículo es que en su país empezó lo peor. Ellos venían luego de cincuenta y tantos días de sufrimiento con la esperanza de ser recibidos por una multitud (como cuando en la Plaza se anunció la noticia de la invasión), es decir, el reconocimiento de la gente por la que pelearon, por la que murieron otros pibes, y los argentinos les regalaron la indiferencia, el olvido y el rencor. Muchos de estos combatientes se resignaron al silencio y a ocultar que fueron soldados de Malvinas. Les dieron la espalda a unos chicos que no superaban los 20 años ¿Es triste, no?
Actualmente, algunos pudieron reconstruir sus vidas –haciendo el esfuerzo de recordar lo menos posible lo que pasó allá, con los piratas-, otros forman parte de la lista de los suicidios de la pos guerra. Sí, suicidios efectuados por culpa de un Estado y de sucesivos gobiernos que los han ignorado, sin darle atención psicológica, manoseándolos, dejando en un segundo plano que los que estuvieron ahí fueron estos chicos y no los “pensantes” que se divertían detrás de un escritorio.
Hoy el saldo de muertes alcanza las 641 víctimas, una gran parte de estos héroes están allá, muchas son tumbas sin nombre, en un lugar donde nadie se acerca, esta alejado, y me pregunto ¿por qué están ahí?, ¿por qué sus familiares no pueden tener un espacio para llorarlos acá?, qué hacen ahí solos, olvidados…es cierto, están en su lugar, en mi lugar, en nuestras Islas, porque siguen siendo nuestras, nos las robaron...lo asqueroso es ver que la soberanía fue una excusa, que los muertos fueron otros porque el 14 de junio los militares dijeron basta, estos cobardes no se enfrentaron con los soldados ingleses, y que pasó, ¿Por qué no aplicaron el mismo método que utilizaron para dar de baja a otros argentinos?...quizás Astiz tenga la respuesta.
En fin, hoy las islas están ocupadas por los ingleses, han pasado 25 años pero ellos no quieren ni siquiera hablar de esto, menos negociar la soberanía. No me importa el contexto, se que hubo chicos que murieron en vano, por culpa de unos cuantos hegemónicos, siempre buscando resignificar su supremacía, aplastando a los oprimidos…sin importar los medios.
Las Malvinas son nuestras, y no hago apología de la violencia, nos pertenecen…no quiero otra vez chicos muertos, solo busco que nos devuelvan lo que se llevaron.
641 muertes….¡NUNCA MAS!...Malvinas fue el último episodio de la masacre que iniciaron unas bestias que hoy siguen impunes, o están “presos” en sus casas con una rejita en la ventana…juicios parados por la cámara de casación compuesta por corruptos…No soporto tanto manoseo, basta de pisotear a los muertos por el terrorismo de Estado.
Todo mi respeto para los que han pasado por ese infierno.

DESTACADO DE LA SEMANA:

A ustedes chicos, Nani y Charly, que cada vez que pego el grito “che, ¿me ayudan?”, están ahí para bancarme, ayudarme y siempre darme lo mejor. Los quiero mucho…y los voy a extrañar cuando me vaya a Mar del Plata…Gracias, por las fotos…porque pusieron todo!.